Trabajas en solitario con una empresa que ofrece servicios de marketing, asesoría fiscal o laboral, desarrollas aplicaciones desde casa o eres cualquier otro profesional de los que hay cada día más. Estás en el mercado compitiendo con grandes empresas y necesitas mejorar tu gestión, llegar a más clientes, diversificar, crear un equipo o acceder a mercados internacionales y todo eso con los mínimos recursos.
¿Se puede? Por supuesto que sí. De entrada, quédate con una primera idea: aunque figures como único socio, no tienes por qué hacer el camino solo, con colaboradores freelancers y acuerdos con otras empresas puedes ser más competitivo con la mínima estructura posible.